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La introducción de las vacunas de la COVID-19 en todo el mundo ha suscitado el debate sobre la necesidad de una documentación digital que certifique la vacunación, así como los resultados de pruebas, de los viajeros para permitir la libre circulación de los inmunizados y la utilización de controles automatizados, de forma que se acelere la reactivación de los vuelos, el turismo y la economía. Veridos, empresa internacional especializada en soluciones holísticas de identidad integradas, explica los cinco requisitos previos para un certificado de vacunación seguro y eficaz.
En consecuencia, "existe una necesidad de encontrar una solución universalmente aplicable que tenga en consideración los procesos ya existentes de identificación para distintos casos de usos y que los asocie de manera segura y eficaz". Al mismo tiempo, el emisor, los ciudadanos y el personal de verificación deben poder confiar en la solución y considerarla fácil de usar.
La empresa agrega que "solo entonces podrá lograrse la adopción generalizada de tales certificados" que sustituyan a los registros en papel que, por una parte, son más fáciles de falsificar y, por otra, harían eternos los procesos de control en un aeropuerto o en otro lugar en el que sea exigida su presentación.
Mantener los datos a un nivel mínimo. Según la firma alemana, un certificado de vacunación seguro debe minimizar los datos incluidos sobre los interesados, utilizando exclusivamente información biográfica según las especificaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Comisión Europea (CE). Los emisores deberán garantizar que los certificados sean comparables a nivel internacional sin almacenar ninguna información innecesaria y por ende considerando la protección de datos personales.
Ofrecer formatos inclusivos. Todos los ciudadanos deberán poder tener acceso a los certificados de vacunación independientemente de su acceso a la tecnología, es decir, deberán tener la posibilidad de obtener un certificado digital o un certificado en formato impreso.
Verificación remota. Igualmente será fundamental que el proceso de verificación sea seguro y en forma remota sin contacto. Mediante el uso de smartphones o tablets como dispositivos de verificación, los certificados podrán comprobarse a una distancia segura, empleando tecnología que ya está ampliamente disponible.
Uso de infraestructuras de claves públicas (PKI). Para optimizar el despliegue y mantener las normas de seguridad, los gobiernos deberán considerar la utilización de las PKI existentes para la creación de los certificados, permitiendo que la operabilidad internacional sea rápida y fácil de implementar.
Implementar una solución estandarizada a nivel nacional. Tanto en los centros de vacunación y testeos, como también en centros médicos locales, habrá que procurar evitar cualquier carga administrativa adicional para el personal sanitario. Aunque los sistemas informáticos pueden variar entre los centros de expedición de certificados, la integración de una única solución creará coherencia y eficacia en todos los niveles.
"Con la creciente disponibilidad de las vacunas contra la COVID-19, la introducción de un certificado de vacunación es un paso esencial para la vuelta a la normalidad", ha puntualizado Marc-Julian Siewert, director de operaciones de Veridos.
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